domingo, 23 de diciembre de 2007

DULCE Y AMARGO


Aquí me encuentro nuevamente sola en un rincón de mi cama, escribiendo y mirando la nada, deseando muy adentro no existir mas, desaparecer de todos lados, irme lejos muy lejos, ser fugitiva por una vez.
Sigo observando la nada que cada vez se vuelve más oscura, más densa y sobre todo más tenebrosa.
Porque a pesar de cómo dicen muchos filósofos “que la nada es nada”, para mi en ciertos momentos nosotros le damos una esencia a esa nada, puede ser bueno o malo.
En mi caso esa maldita nada muestra mis mayores miedos, mis peores errores, todo lo que una persona jamás quisiera volver a vivir y/o recordar.
Esos momentos donde solo hay lágrimas, donde no existe ni una sonrisa, donde no hay colores.
Horribles sentimientos me invaden, sentimientos que no logro explicar, bronca, odio, temor, rencor, son tantos que mi corazón ya no los identifica.
Siento que en estos momentos tengo la cabeza de un loco si de esos locos que nadie sabe como va a reaccionar, ni yo misma me reconozco, no quiero estar así, necesito liberarme de tanta presión de tanta maldad, de tanto egoísmo.
No se como escapar, como lograrlo?, si ya me atrapo como una telaraña y definitivamente soy prisionera de todo esto y se que en el fondo me lo merezco.
Tendré que cumplir mi castigo, pero porque de esta manera, una manera tan parecida al veneno, si te va matando de apoco y dejando sin nada de nada.
Dulce y amargo a la vez, acido y picante como yo misma se, veneno que no he de probar, liquido maligno que no eh de tomar, pero que mi mismo inconciente ya totalmente ido y tenebroso quiere conocer.
Probar?, Perder? Y olvidar?, tres palabras fáciles de decir pero difíciles de accionar.
Pero cual es el veneno y cual es el antídoto, mi corazón, ni mi alma logran reconocerlos entre tanta oscuridad.
Es común en mi que día a día me deje así, ese fantasma que siempre me invade y logra sacar todo lo peor de mi, sin palabras y con este miedo a un futuro que no se si realmente existirá.

5 comentarios:

Gastón Martorelli dijo...

Texto apocalíptico...
No hubirea querido estar con vos en ese momento, al pie de la cama, mientras escribías esto.
Pero, de todos modos, este texto quizás fue el veneno que te hizo "sacar lo positivo"...

Vany, muy lindo...
Seguí escribiendo...
besos
Gastón

pennylanebcn dijo...

"cuál es el veneno y cuál es el antídoto"
Precioso. Un escrito con mucho sentimiento.

Un saludo

Regina

Gastón Martorelli dijo...

Veo que un blog que está entre mis favoritos, como Regina, te firmo y le ha gustado lo que escribiste.

¿Para cuándo otra historia, Vany?
La espero, la esperamos todos...
Dale, que no se duerma esa escritora que tenés dentro con sentimientos dispares, con rabia y amor.

Beso grande, y quiero otro texto :P
Gastón

Gastón Martorelli dijo...

Dejé en cuarto-menguante.blogspot.com algo para vos. Espero que te incentive. Abrazos y besos Vany !

Eme dijo...

todos nos perdemos en esa nada.

saludos.